Los accidentes automovilísticos son un tema que se debe tomar muy en serio, tanto por el gobierno, como por las empresas constructoras, diseñadores y sobre todo, por conductores; en México, 16 mil personas mueren al año por causa de un accidente vial y se contabilizan miles de millones de pesos en pérdidas (150 mil millones al año).
En Caduma, ya hemos hablado de algunas formas en que los conductores pueden reducir riesgos y evitar accidentes viales, así como el uso de tecnología gubernamental/privada para garantizar que los conductores no manejen a exceso de velocidad (la primera causa de la mayoría de los accidentes viales).
O sea, que el diseño de las calles y avenidas, sus malas condiciones o falta de mantenimiento también provocan muertes y pérdidas monetarias a los mexicanos
Una ASV es un estudio realizado por profesionales calificados en el tema que analizan a fondo un proyecto vial o de tránsito, existente o futuro, sobre el riesgo de que se generen accidentes y del comportamiento del proyecto desde la perspectiva de la seguridad vial.
Además, la ASV también considera las necesidades de todos los usuarios de la calle y/o avenida: tanto vehículos motorizados, así como bicicletas y peatones, o tracción animal, etc. Este estudio se puede realizar de dos maneras:
Como lo explica la gráfica anterior, las ASV son más convenientes cuanto más pronto se realicen, pues los costos de operación se mantienen bajos y las modificaciones necesarias se aplican sólo en los proyectos y/o diseños, no ya en la obra, lo cual resultaría mucho más tardado, complicado y costoso.
Algunas de las principales preocupaciones que se pueden detectar y/o atender con una oportuna ASV, son: los taludes de terraplén pronunciados y sin protección, los pavimentos lisos, la discontinuidad de las vialidades y sistemas de contención para los vehículos a motor, la mala ubicación de un cruce peatonal, paradero o semáforo, las señales bloqueadas por vegetación, deficiencia del señalamiento horizontal, etc.
Todos estos elementos, detectados a tiempo, pueden atenderse y generar estrategias y planes que reduzcan el riesgo a los automovilistas, peatones, ciclistas, motociclistas y otros; datos oficiales del Gobierno Federal (SCT) han demostrado que las ASV en los ambos métodos ya mencionados, son sumamente benéficos en materia de seguridad para los usuarios de la carretera.
Es muy importante resaltar que las ASV son más eficientes cuando se ejecutan durante las primeras etapas del proyecto; o sea, que mientras más temprano se inspeccionen los proyectos/obras, se puede intervenir de una manera más eficaz en una carretera y con ello se disminuirá el costo de la seguridad vial para la sociedad.
En Caduma, contamos con la experiencia y profesionalidad que se requiere para realizar una ASV en tiempo y forma adecuada, para así mantener los inconvenientes de su ejecución al margen y sobre todo, reducir los riesgos de calles, vialidades y/o carreteras para los usuarios, para que toda obra vial cuente con los requerimientos de seguridad necesarios.